Un encuentro propiciado por el climatismo

Tapa del álbum fotográfico “Pau et ses environs” por C. Venat y J.J. Heilmann
Tapa del álbum fotográfico Pau et ses environs por C. Venat y J.J. Heilmann.
Bibliothèque Patrimoniale Pau, cote PHA113

A principios de los años 1850, tres talentosos operadores originarios del norte y del este, aficionados ilustrados tanto como profesionales, van a protagonizar el auge del calotipo y del colodión en Pau, simultáneamente con los actores de una “escuela” de fotografía artística del paisaje.

La ciudad es la capital de Bearne así como el foco de una terapia muy novedosa en ese entonces, el “climatismo.

Fueron motivos médicos que los indujeron los tres a establecerse temporalmente en Pau. Puerta de la parte occidental de la cordillera, donde los tratamientos termales van atrayendo a una abundante clientela internacional desde hace varias décadas, la ciudad es la capital de Bearne así como el foco de una terapia muy novedosa en ese entonces, el “climatismo”, ramo de la medicina natural cuyos beneficios se fundan según el Doctor Alexander Taylor en el cambio de aires. Otro británico, el muy renombrado Henry Russell, aun escribía alrededor del 1900 que Pau era “el gran y querido refugio de los tuberculosos […] su última esperanza a no ser que se marchen de Europa...”

Jean-Jacques Heilmann (1822-1859)

... llegó allí en 1852 con el deseo de curarse de la tuberculosis que padecía; ésta se lo llevará desafortunadamente en 1859, en su casa de Gelos cerca de Pau. Titulado en ingeniería, natural de Mulhouse en el corazón de una Alsacia rápidamente subyugada por las promesas de la fotografía, trabajaba hasta entonces en la empresa familiar de producción textil. Fue en este ambiente próspero, sensible a esta innovación técnica integradora y generadora de progreso, que se inició en la toma de vistas y la tira de pruebas. La revista La Lumière con fecha del 2 de septiembre de 1851 ya elogiaba “las espléndidas láminas fotográficas del Sr. Heilmann” conseguidas sobre placas de vidrio recubiertas de colodión (solución de algodón pólvora) sensibilizado, según el proceso elaborado por el inglés Scott Archer.

Vue des Eaux-Bonnes
Vue des Eaux-Bonnes. Bibliothèque patrimoniale de Pau, cote PHA149

John Stewart (1814-1887)

... era escocés; fue la salud débil de su mujer la que lo llevó a residir en Pau a partir de 1846 o 1847, en medio de una colonia británica ya importante. Su hermana mayor era la esposa de John Herschel, astrónomo y químico cuyas competencias en esta disciplina, al igual que su relación amiga con Henri Fox Talbot, uno de los tres inventores de la fotografía, impulsaron sin lugar a dudas la vocación de su joven cuñado. Stewart es por lo tanto un incondicional del calotipo (palabra procedente del griego que significa “imagen preciosa”), versión inglesa del invento de  la fotografía por Niepce y luego Daguerre.    Este
procedimiento se basa desde el origen en el principio negativo/positivo y presenta la ventaja de poder generar múltiples copias a partir del mismo papel negativo una vez translúcido éste. La materialidad (fibra, grano) de este papel, que la luz proyecta del mismo modo que la imagen en el soporte positivo, confiere a sus primeras pruebas pirenaicas un encanto incontestable. Serán éstas el origen de un espléndido álbum, Souvenirs des Pyrénées, gracias a la imprenta fotográfica Blanquart-Evrard en Lille (1853).

Le torrent d'Arudy, par John Stewart
Le torrent d'Arudy, par John Stewart. Bibliothèque patrimoniale de Pau, cote PHA59

Farnham Maxwell Lyte (1828-1906)

... se unió a ellos en 1853. Si hemos de creer lo que declara Lori Pauli, conservadora en el museo canadiense de las bellas artes y autora de un artículo sobre Maxwell Lyte publicado en 2000, “gastralgias” repetidas, que quebrantaban su salud, son la razón por la que buscó un clima más conveniente durante el invierno del 1853. Demás fuentes librescas aluden a una enfermedad de pecho. Se relacionó bastante rápidamente con Steward y Heilmann, compartiendo con ellos su pasión por la fée argentique1 durante algunos años. Dotado de una sólida formación en ingeniería química, empezó a practicar la fotografía en torno a 1851 según el procedimiento al colodión húmedo de Scott Archer que permite fijar la emulsión fotosensible sobre una placa de vidrio gracias a una solución de algodón pólvora. Totalmente lisa y transparente (contrariamente al calotipo), la placa facilita la obtención de vistas de gran precisión y nitidez.

Fort d'Urdos, par Maxwell-Lyte
Fort d'Urdos, par Maxwell-Lyte. Bibliothèque patrimoniale de Pau, cote PHA32

Una fuerte emulación animaba a este trío a perfeccionar constantemente el conjunto de los parámetros que rigen la producción de imágenes, desde la toma de vistas hasta la ampliación de pruebas negativas de las que Heilmann fue uno de los pioneros. Siendo sus viajes restringidos por su salud, operaba principalmente en los alrededores de Pau y en el valle de Ossau.

Muy particularmente en Eaux-Bonnes, realizó una de las primeras imágenes instantáneas: una vista de la avenida principal mostrando a personajes    en movimiento, en la que capturó la borrosidad de los gestos de dos de ellos.

Vue générale des Eaux-Bonnes, par J. J. Heilmann
Vue générale des Eaux-Bonnes, par J. J. Heilmann.
Archives départementales des Pyrénées-Atlantiques, cote 4FI2

A Heilmann también le debemos escenas de género sumamente bellas y conmovedoras, como Gabas, que reúnen, justo en lo alto del pueblo y a la manera de un cuadro vivo, nativos o lugareños, pastores, guías y viajeros.

En 1853, Gaudin, crítico de fotografía para la revista La Lumière, escribe a propósito de la aventura fotográfica de Heilmann: “No pudo conseguir nada durante varios días; sus placas siempre estaban veladas, lo que atribuyó, con razón en mi opinión, a las emanaciones sulfurosas permanentes en aquel lugar. Actuaban como un acelerador demasiado enérgico que reducía la plata en la ausencia de luz. Para triunfar, tuvo que mitigar la sensibilidad del colodión.” En 1857, La Lumière vuelve a alabar sus resultados a través de la pluma de Ernest Lacan: “Se puede establecer el paralelo entre las vistas que captura en colodión desde el procedimiento del Sr. Maxwell Lyte y las mejores producciones de los ingleses.” ¡Cumplido supremo!

Heilmann también nos ha dejado imágenes excepcionales de Pau, tal como la Place Royale bajo la nieve en diciembre de 1843. Después de abrir un taller efímero en Pau, el fotógrafo va a practicar con mucho placer el arte del retrato tanto en estudio como al aire libre.

Place Royale bajo la nieve, por J. J. Heilmann
Place Royale bajo la nieve, por J. J. Heilmann. Volumen 1, página 83

Así fueron realizados los espléndidos retratos en los que figura el guía Lanusse de Eaux-Bonnes entre los suyos, y que Houbigant insertará a posteriori en las páginas que recuerdan su encuentro con el célebre guía en 1848.

 

Hélène Saule-Sorbé, profesora universitaria de Artes Plásticas 
Universidad Michel de Montaigne - Burdeos 3